½ûÂþÌìÌÃ

Menu
½ûÂþÌìÌÃ
Buscar
Revista
Buscar

Costumbres y protocolo social para españoles en Marruecos

Marruecos - España
Adobe Firefly
Escrito porJavier Olivas Alguacilel 05 Agosto 2025

Vivir en Marruecos no es solo una cuestión de adaptarse a un nuevo paisaje, a un clima diferente o a una gastronomía deliciosa: también implica entender y respetar una serie de costumbres y normas sociales que forman parte esencial de la vida cotidiana. Aunque Marruecos y España son vecinos separados por apenas 14 kilómetros de mar, las diferencias culturales pueden ser significativas. Conocerlas no solo facilita la integración, sino que también ayuda a evitar malentendidos.

El saludo, una puerta a la confianza

En Marruecos, saludar es mucho más que un trámite: es un momento para establecer conexión. Lo habitual es estrechar la mano con firmeza y una sonrisa, manteniendo contacto visual. Entre personas que ya tienen confianza, puede añadirse un beso en cada mejilla (empezando por la derecha), aunque esto se da más entre personas del mismo sexo.

Un detalle importante: el saludo suele ir acompañado de preguntas sobre la familia, la salud y el trabajo. No es una mera fórmula; se espera una breve respuesta, aunque no necesariamente detallada.

Consejo para españoles: tómate tu tiempo para saludar, incluso si tienes prisa. Un saludo apresurado o sin contacto visual puede interpretarse como descortesía.

La importancia del té

En Marruecos, el té de menta no es solo una bebida: es un símbolo de hospitalidad. Si te invitan a una casa, es casi seguro que te ofrecerán té, y rechazarlo de forma tajante puede considerarse poco amable. Si no deseas tomarlo, lo más cortés es aceptar una pequeña cantidad y beber un sorbo, agradeciendo la atención.

Consejo para españoles: recuerda que el té se sirve muy caliente y muy dulce. Si prefieres menos azúcar, puedes pedirlo amablemente, pero hazlo con tacto.

La comida: un acto de convivencia

Las comidas en Marruecos, especialmente cuando se comparten en casa, suelen ser momentos de encuentro y conversación. Es habitual comer de un plato grande común, utilizando pan para tomar la comida, empezando por la parte que tienes más cerca.

Antes de comer, es costumbre lavarse las manos; en muchas casas, el anfitrión ofrecerá una jarra y un recipiente para que los invitados se las laven en la mesa antes de comenzar.

Consejo para españoles: usa siempre la mano derecha para comer y pasar objetos, ya que la mano izquierda se considera impura para estos gestos.

Vestimenta: respeto y sentido común

Aunque Marruecos es un país diverso y las ciudades grandes pueden ser más abiertas en cuanto a la vestimenta, en general se aprecia la modestia, especialmente en zonas rurales o tradicionales. No es obligatorio llevar ropa que cubra completamente brazos y piernas, pero sí es recomendable evitar prendas muy ajustadas o reveladoras en entornos públicos.

Consejo para españoles: adapta tu vestimenta al contexto. Un pantalón largo o falda por la rodilla y una camiseta con mangas suelen ser bien aceptados en casi cualquier situación.

El papel de la religión

El islam es parte fundamental de la vida en Marruecos, y sus prácticas marcan el ritmo cotidiano. Durante el Ramadán, por ejemplo, es importante respetar que la mayoría de la población ayuna desde el amanecer hasta la puesta de sol. Comer, beber o fumar en público durante esas horas puede interpretarse como una falta de consideración.

Consejo para españoles: incluso si no participas en el ayuno, muestra empatía: evita ofrecer comida o bebidas en público durante el día y felicita a tus conocidos al final del Ramadán con un "Eid Mubarak".

Negociar en el zoco: más que un regateo

En Marruecos, el regateo no es solo un modo de ajustar precios: es parte de la interacción social y una especie de juego de ingenio. Mostrar interés, contraofertar y conversar forma parte del proceso. Sin embargo, es importante hacerlo con una actitud amable y sin presionar excesivamente.

Consejo para españoles: empieza ofreciendo alrededor de la mitad del precio inicial y avanza poco a poco. Recuerda que, más allá del precio, la experiencia del trato es lo que cuenta.

Espacio personal y contacto físico

En las relaciones sociales marroquíes, el contacto físico entre personas del mismo sexo es más frecuente que en España: es común ver a amigos caminar cogidos de la mano o del brazo. Sin embargo, entre hombres y mujeres que no son familiares, el contacto físico suele ser mucho más limitado.

Consejo para españoles: deja que sea la otra persona quien marque el nivel de contacto físico y evita gestos como abrazar o besar en la mejilla a alguien del sexo opuesto a menos que ellos lo inicien.

Puntualidad… relativa

El tiempo en Marruecos puede tener un ritmo más relajado que en España, sobre todo en reuniones sociales. No es raro que un encuentro previsto para una hora concreta empiece con cierto retraso. En cambio, en contextos laborales o institucionales, la puntualidad es más valorada.

Consejo para españoles: si vas a una cita social, llegar unos minutos tarde puede ser normal; para negocios, mejor llegar puntual.

Vida de cada día
Marruecos
Sobre

Lingüista y especialista en el tratamiento de la información, responsable de comunicación y contenidos para la comunidad hispanohablante en ½ûÂþÌìÌÃ. Profesor universitario y creador de contenidos multimedia. He realizado parte de mis estudios en el extranjero (Francia) y he desarrollado la mayor parte de mi carrera profesional fuera de España. Desde 2013 resido en el extranjero, acumulando más de 20 años de experiencia como expatriado, principalmente en Isla Mauricio (donde vivo actualmente), La Reunión, Inglaterra, Francia, Bélgica, México y Estados Unidos. A lo largo de estos años, me he especializado en el sector de la comunicación y la creación de contenidos dirigidos a españoles en el extranjero. Paralelamente, he continuado mi labor como docente universitario en diversas instituciones y como creador audiovisual. Desde hace dos décadas, edito guías para expatriados y artículos sobre la vida fuera de España, y participo activamente en eventos y foros dirigidos a la comunidad española en el exterior.

Comentarios